Cuando se dieron a conocer las listas definitivas para las elecciones provinciales del 14 de mayo, sorprendió la aparición de un candidato a gobernador que no estaba en los planes: Luis Benjamín Burgos, por el Partido Camino a la Lealtad. De 45 años, Burgos es un dirigente peronista que ya fue candidato en otras elecciones pero que nunca ocupó un cargo electivo. Ex asesor del legislador Juan Antonio Ruiz Olivares, denuncia que en 2019 debió renunciar por no ser del agrado de Osvaldo Jaldo.

“Vengo militando hace 27 años dentro del peronismo. Como todo referente, somos respetuosos ante la línea y la conducción, pero cuando esto se desborda, y empezamos a ver que las cosas no van con los conceptos ideológicos, ya empezamos a reflexionar sobre el pensamiento y la forma de vida que estamos llevando, que no van acorde a nuestros conceptos ideológicos”, detalló Burgos a LA GACETA. 

“Hemos pensado más de una vez llegar a un diálogo con la conducción del peronismo, pero siempre ponen a los amigos, a la familia, pierden el respeto ante el pueblo, la dirigencia, ante el mismo partido político”, apuntó. Además denunció acuerdos del Gobierno provincial con sectores opositores. “Sale un Federico Masso, que tiene acuerdo con el peronismo, y esto no lo dicen ni lo hacen saber. Sabemos bien el tema de los acuerdos con Ricardo Bussi también”, subrayó. 

Dijo que toda esta situación, sumada a la delicada situación social y económica del país, y de la provincia, lo llevó a tomar la decisión de romper con el PJ. “Esto es algo histórico, jamás se vio que las bases del peronismo salgan a confrontar a los sectores oficialistas como opositor, y dentro de la línea del peronismo”, apuntaló. 

“Somos del peronismo ortodoxo, de centro derecha”, indicó Burgos, que advirtió que, debido a su ruptura con la conducción del PJ, están sufriendo consecuencias. “Se nos cierran las puertas totalmente. Muchos compañeros quedaron afuera de sus trabajos para acompañar este movimiento”. 

“Al salir nosotros, sabemos que muchos en 2027 se van a animar. Las dirigencias de base de todos los sectores deben entender también su protagonismo, ya que son militantes que vienen trabajando dentro del territorio por años, por trayectoria, por antigüedad, y no son reconocidos”, reflexionó 

Burgos, que mencionó, como una de las propuestas de su partido, la creación de dos entes reguladores: uno de justicia, y otro social, bajo cuya órbita entrarían áreas como salud, educación, obras públicas y medio ambiente.